
Cada cual tendrá sus razones, pero lo cierto es que cuando se produce una separación, todo el mundo alrededor de la pareja se tambalea. Es importante que durante el proceso legal del divorcio ambos cónyuges cuenten con el asesoramiento, la experiencia y el saber hacer de expertos en Derecho de Familia, sobre todo en el caso de que haya niños de por medio.
Cuando una pareja toma la decisión de separarse de manera legal, es decir, solicitar el divorcio judicial o notarial, debe tener presente que es un camino que está plagado de trámites y firmas de convenios, papeleos, etc. En estos casos lo ideal es ponerse en contacto con un bufete de abogados matrimonialistas Madrid.
Que informe con detalle de todos los documentos que son necesarios presentar y de las fechas y lugares donde hacerlo. En suma, contar con el asesoramiento de especialistas que faciliten todo el proceso y aporten garantías de que todo se realiza con todas las garantías legales.
Bufete experto en derecho de familia
El mejor abogado matrimonialista no es el que habla con más tecnicismos o utiliza términos solo comprensibles por compañeros de profesión. El mejor abogado matrimonialista deberá ser claro en sus explicaciones ante sus clientes, ser accesible y permitir que los interesados puedan comprender cómo funciona el proceso en el que están inmersos y qué derechos y obligaciones tienen.
Esto debe ser así porque la mayoría de las personas no tienen conocimientos legales ni técnicos sobre derecho matrimonial, por lo que hay que asesorarles desde un punto de vista práctico, para que comprendan los términos de lo que van a firmar y las consecuencias que ello conlleva a la hora de la crianza de los hijos, o los gastos de manutención.
Redacción de Convenios reguladores
Precisamente para establecer una serie de normas a seguir y de condiciones para la convivencia después de la separación es para lo que sirven los convenios reguladores. Este documento es de obligada firma por parte de ambos cónyuges y establece los detalles que serán de obligado cumplimiento para salvaguardar los derechos de las dos partes, así como de los menores a su cargo.
En el caso de que una pareja con hijos se quiera separar y no esté casada, entonces también será necesario firmar el convenio regulador, puesto que igualmente servirá para establecer las relaciones entre los padres y los hijos y acordar los derechos y obligaciones entre los progenitores. Por lo tanto, también hay que firmar un convenio regulador sin matrimonio en el caso de que haya hijos en la pareja que termina su relación.
Este convenio regulador se traduce a nivel jurídico un proceso de medidas paternofiliales y, como en el caso de los divorcios, se puede tramitar de mutuo acuerdo, mejorando así las relaciones entre las partes y evitando conflictos con los hijos; o bien gestionarse por lo contencioso en las situaciones en las que los progenitores no se pongan de acuerdo con las medidas acordadas por el juez.
Custodia compartida, el más firmado en España
Cuando se redacta un convenio regulador en una pareja que se separa con hijos a cargo, es fundamental establecer la patria potestad, la guarda y custodia, el régimen de visitas o la pensión de alimentos. En estos momentos lo más preferido en España es la custodia compartida, tanto para parejas divorciadas como para las que se separan sin estar casadas.
Dependiendo del tipo de custodia se establecerán el resto de asuntos, como la pensión de alimentos o el uso y disfrute del domicilio familiar. Este régimen es el más favorecedor para los menores, siempre y cuando los dos progenitores quieran y puedan ponerla en práctica con corresponsabilidad.
En cuanto al lugar de residencia habitual de los menores, suele ser común que los menores permanezcan en el domicilio familiar y sean los padres quienes alternen su presencia dependiendo de su período de custodia correspondiente.